vacía

Desperté, jamás habría imaginado que estaría en este día.
Ojalá un asteroide me hubiera fulminado antes de llegar a hoy.
De haber sabido, me habría arrojado ayer desde el puente, al asfalto asegurándome del verde en el semáforo, para no fallar en el plan y sentirme más miserable de lo que soy ahora.
Quién diría que después de una eternidad de sentirte a mi lado, te descubrí tan lejana y aún no sé que día fue tu partida.
¿Cuando fue que dijiste adiós?
¿Habrá sido mi estúpido autismo, quien me hizo dejarte ir?
¿Habrá sido después del café un día cualquiera?
Dime,  ¿Siquiera lo recuerdas?, o será que esta mañana también caíste en cuenta que hace tiempo que no estabas aquí.
Iría a buscarte, si lo pidieras y como un perro seguiría tu rastro, me encapricharía con la mínima esencia de tu perfume, sin abandonar la causa.
Pero solo arrojas piedras a mi ventana y en el viento te esfumas, para perderte de mi.
Aún creo que si hubieras dicho adiós lo recordaría, aún creo que estás aquí y que no te perdí.

Autismo, eterno, yo y tu ausencia.

Pan

Nadie sabrá jamás...

cuanto te esperé y como nunca llegaste.
todas las historias que inventé para justificar tu tan presente ausencia.
cada una de las palabras que el día de hoy te dediqué.
cuantas veces repasé mi maquillaje para parecer perfecta ante tus ojos.
de las miles de mariposas, que en mi estómago, parecía, hacían una fiesta.
que si te llamé fue por desesperación y no por amor.
que no apareciste.
como mis ojos se nublaron por las lágrimas al saber que no vendrías.
todas las frases de Cortázar que hoy me hicieron evocarte.
de las ilusiones muertas que me comeré untadas en rebanadas de pan.
de esos besos que en mis labios marchitaron, al no poder encontrar la humedad de los tuyos.
de cuanto anhelaba que hoy de verdad fuera martes....

Cirilo I

Has creído en mí cuando menos confianza tenía en mí.

Inferno

No quiero llevarte conmigo...

tentaciones y demonios me acechan,

los vicios me corroen,

soy del mal materia dispuesta.

No concibo la idea,

la simple y sencilla idea

de convertirte a ti ángel,

a ti hermoso ser de luz,

en un demonio más, 

en un sirviente del mal,

en un hechicero del más allá.

Te veo a la orilla de este precipicio,

tan cerca de caer, y al caer 

te sostendría entre mis brazos.

Aún no sé porque ni para que,

pero aquí abajo, 

preferiría tenerte entre mis brazos.

Podría abrazarte, 

y así calmar mi soledad.

Dejaría de caminar en silencio.

Podrías ser mi escudo, 

mi protección.

Y de alguna manera ...

sabiendo que estás aquí,

de vez en cuando me podría detener.

O quizá, te hundirá junto conmigo

te llevaría a lo más obscuro.

Te pudrirías conmigo hasta el final.

Te enredaría en oscuros laberintos.

En cada intento tuyo por escapar, 

te cortaría uno por uno

los dedos de los pies.

Y si un día me decidiera a salir,

te obligaría a ir por delante.

Serías la luz y guía, 

te forzaría a arrastrarme,

aún cuando las fuerzas te fallen.

1

Hoy no se como decirte todo lo que siento...
Te veo a lo lejos y el corazón se acelera ante la sospecha de que quizá te irás más lejos.

Y si contigo me sincero, debo confesar que intente acercarme,
antes de que salieras corriendo a esconderte de mi y mis preguntas,
es solo que nunca encontre la manera,
nunca he sido un buena estratega.

Quise por mi cuenta, encontrar el camino,
termine en un bosque dando vueltas al rededor de ti y
si poder acercarme jamás.

Sé que un día llegué, llegué ahí donde estabas tu,
toqué tu sangre, besé tu corazón, respire de tus palabras y
suspiré en tus labios...
Es el retrato frágil, que entre tantas travesías para llegar a ti,
se ha ido borrando, hasta casi existir solo en mi imaginación.

Es así como hoy necesito hablar de aquello que difícilmente podré explicar.
Borrar de mi la angustia que me provoca pensar ya no en tu ausencia, sino en alimentar la distancia entre tu y yo.
Y entiendo que no quieras discutir esto conmigo una vez más.

Me detendré el día que encuentre una luz, y como mosquito la seguiré,
solo con la esperanza de que sea una señal hacía ti.

Primer lluvia

Dices que es la primer lluvia
dices tan poco....

Es la primer lluvia estacional,
y no así la primera que mis ojos ven.

Hay tanto que callas,
y me duele.

Somos tan distintos,
y cada día más distantes.

Hasta aquí, porque mi voz se quiebra,
las fuerzas flaquean, la voluntad se dobla,
los ánimos huyen despavoridos.

Algo se rompió y aún no encuentro que,
descansa tu que no lo ves.

Más añorables

Hubo un día, que no esperaba que llegara ni sabía que existiría,

ese día en que los amigos se volvieron unos completos desconocidos.

Nunca supe como llegamos hasta ese día, 

aún me pregunto como fue que saliendo de casa al medio día me encontré a uno de ellos en la banqueta, con la barba desarreglada, la vida desordenada y el alma desgarrada, exhibiéndose  detrás de esa mirada perdida. 

No entiendo cuando fue que nos soltamos las manos, que dejamos de mirar a un lado, que nos dejamos absorber por la fantasía que el egoísmo nos presento tal cual la manzana de la perdición, disfrazada de maravillas y al final desterrándonos del paraíso donde compartíamos vidas y secretos.

Uno a uno se fueron, y los que llegaron no los reemplazaron solo los hicieron más añorables, pues la inocencia de aquellos días se esfumo, se enmoheció con la humedad de los sueños vanos y terminó pudriéndose.

Me falla la memoria y la consciencia, me faltan ellos y la decencia. 

Y aún siendo unos desconocidos, a la salud de las memorias, les entregaría lo que soy, tengo y aún conservo, sin afán de recuperar, quizá solo de encontrar.

Se fueron, como la magia al pasar de los años, como un ser va perdiendo su conciencia... y quizá mañana seré yo quien se vaya, y al fin deje de añorar... al fin me olvide de lo que perdí.